A través del proyecto titulado “Elaboración expediente casa José Colivoro Vera, Repollal Alto, Melinka” Folio N° 81935, se busca la salvaguardia de las técnicas artesanales de auto-construcción que han practicado cultores de oficios tradicionales ligados a la madera, como los tejueleros artesanales del ciprés de Las Guaitecas, en la zona insular. La presente iniciativa es financiada por el Fondo del Patrimonio Cultural del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Concurso Regional, convocatoria 2023 y tiene una duración de ejecución durante 10 meses.
El responsable de la ejecución de esta iniciativa es la Corporación Memoria Austral y cuyo equipo de trabajo se conforma por el ingeniero Forestal y THV Carlos Castillo Levicoy, la Dra. en Historia y académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso Ximena Urbina Carrasco y la antropóloga social Irene Ruíz Pareras.
Don José Colivoro Vera, propietario del inmueble y Tesoro Humano Vivo (THV) de la tejuelería del ciprés, comenta: “Esta iniciativa me parece bien y más aún que se busque declarar la casa como Monumento Histórico Inmueble, porque esa casa lo hice sólo con mucho sacrificio y es toda de ciprés de Las Guaitecas, hay toda una historia de vida en esa casa. Cómo no vamos a estar felices de que la casa sea declarada, seguir rescatando el trabajo de las tejuelas artesanales y así también entregar los conocimientos que uno ha aprendido como tejuelero y como carpintero”.
El encargado de Cultura de la Ilustre Municipalidad de Guaitecas, Samir Barrientos Morales, destaca que, “relevar la casa de don José Colivoro como patrimonio vernáculo no es sólo reconocer a una estructura y su materialidad, sino que también y por sobre todo, es reconocer la historia local y los oficios tradicionales involucrados en la misma, tales como la carpintería de ribera y la tejuelería, actividades que tuvieron un gran impacto en el desarrollo urbano y demográfico de Las Guaitecas; además, es reconocer a Repollal como punto iniciático y fundacional de la comuna. Como Municipalidad nos mostramos enormemente agradecidos con este tipo de iniciativas, ya que, dada la naturaleza insular del territorio, a veces se torna desafiante poder concretar iniciativas tan importantes como ésta, la que, dicho sea de paso, abre una ventana para el desarrollo de una de nuestras grandes aspiraciones: el turismo cultural”.
“Para la Corporación Memoria Austral esta iniciativa se enmarca dentro de los proyectos que tienen relación con la Puesta en Valor del Patrimonio Cultural de la Patagonia Insular, mediante diferentes iniciativas desarrolladas junto a las diversas comunidades insulares, relevando la historia del poblamiento insular de Aysén con la finalidad de velar por la salvaguardia de la identidad regional”, destaca la arquitecta y presidenta de la Corporación, María Dolores Altamirano.
Por su parte, el investigador Carlos Castillo Levicoy, menciona que “este tipo de proyectos nos permite materializar el trabajo de investigación básica que hemos venido realizando en el territorio aisenino con respecto a la salvaguardia de los sistemas constructivos vernáculos, que datan de hace más de 50 años. Los propietarios, durante el trabajo en campo, siempre preguntan: ¿Cómo hacemos para proteger y recuperar nuestros inmuebles antiguos?, y una de las respuestas es que, dentro de las posibilidades, pueden considerar la inversión propia y, por otro lado, el apoyo estatal, a través de sus instituciones, como, por ejemplo, el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). Esta institución puede reconocer el valor y los atributos de ciertos elementos tangibles en un territorio determinado, a través de una declaratoria de protección, y que permitiría su conservación y recuperación en un mediano plazo. Este proceso debe llevarse a cabo mediante un trabajo estrecho entre el propietario, la comunidad aledaña, investigadores, organizaciones, Municipalidades, el CMN, universidades y otras instituciones públicas y privadas.
En resumen, la elaboración del expediente de la casa de don José Colivoro, en Repollal alto, viene a apoyar fuertemente la idea y sueño del propietario y su familia para la protección y conservación de su casa y que pueda convertirse en un futuro museo local abierto a la comunidad y turistas que visitan la zona.
De esta forma se profundiza el conocimiento la comprensión de la historia ligada al poblamiento reciente por parte de diferentes familias que se establecieron en Melinka y alrededores, influyendo en la valorización de las propias técnicas constructivas locales y sus oficios artesanales ligados, como la tejuelería artesanal. Esto último aspecto está directamente relacionado con uno de los objetivos que tiene el Plan de Salvaguardia elaborado en el año 2022 para el elemento PCI -Tejuelería en la región de Aysén, destaca Carlos Castillo.
Nota de Carlos Castillo