Tejueleros de Guaitecas son reconocidos como Tesoros Humanos Vivos
Por primera vez en Guaitecas, dos integrantes de la comunidad han sido distinguidos como Tesoros Humanos Vivos, un reconocimiento de la Unesco, a través del Consejo de la Cultura, a personas o comunidades que son portadores de manifestaciones del patrimonio cultural de nuestro país y que son altamente importantes para Chile y su identidad.
En esta oportunidad Ramón Carimoney y José del Carmen Colivoro, fueron reconocidos por su trabajo como tejueleros, y por ser de las últimas personas que realizan este tradicional oficio del sector, ya desde hace más de 40 años.“Estamos inmensamente orgullosos de que se otorgara este reconocimiento a nuestros tejueleros, que se reconozca su esfuerzo por ejercer este oficio que ya está en extinción en nuestra isla, y que ha sido tan importante en su historia” expresó Cristian Alvarado, alcalde de la comuna.
La iniciativa de postulación nace por el trabajo de Mario Sepúlveda y Alejandra Araya, quienes participan en Servicio País en la comuna, incentivados por el interés que existe por parte de la misma comunidad por reconocer el trabajo que realizan los tejueleros en el sector.
“Como Servicio País nosotros trabajamos con maestros locales y dentro de las líneas de acción ellos propusieron realizar algún tipo de reconocimiento a estos cultores, cuando vimos que existía la posibilidad de postularlos, realizamos una recopilación de archivos que ya existían sobre su trabajo y culminó en ser parte de los Tesoros Humanos Vivos” agregó Mario Sepúlveda, arquitecto de Servicio País en Guaitecas.
El trabajo de los tejueleros, está relacionado con Melinka desde sus comienzos, ha servido como parte de la identidad de la isla, vinculando también a la comunidad con su entorno, realizándola además con instrumentos netamente artesanales, y tratando de mantener un equilibrio entre extracción y cuidado del medioambiente.
“Nosotros comenzamos a buscar la aceptación de la comunidad, las autoridades locales firmaron y a su vez hicimos una encuesta a 50 pobladores los que estuvieron de acuerdo en que don Ramón y don José son personajes relevantes y los últimos tejueleros de la comuna”, expresó Alejandra Araya, voluntaria de Servicio País en Guaitecas.
El archipiélago de las Guaitecas vio sus inicios incentivado por el comercio del ciprés de las Guaitecas, madera que por su calidad era requerida desde diversos sectores, tanto en Chile como en el extranjero, años de historia vinculan la extracción de esta conífera con la comunidad de Melinka, y hoy le dan a la isla el reconocimiento internacional de tener entre sus habitantes a dos de los Tesoros Humanos Vivos de nuestro país.