EL HISTÓRICO CASO DE RADIO ESTRELLA DEL MAR DE MELINKA
Hace unos días se realizó en Santiago, en dependencias de Cancillería, una ceremonia en la que el Estado chileno firmó un acta de entendimiento para tomar una serie de medidas a partir de lo que se ha denominado “el caso Radio Estrella del Mar de Melinka”.
El caso se remonta a hace más de 20 años, cuando desde el municipio se cortaba la electricidad a Radio Estrella del Mar de Melinka, que en aquel entonces estaba a cargo de Narciso Nahuelquín.
Ante la ocurrencia de esta arbitrariedad y trato discriminatorio, la radio, perteneciente a la Iglesia Católica, acudió en primera instancia a la justicia chilena y posteriormente a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, demandando al Estado chileno por esta práctica discriminatoria del municipio y que atentaba abiertamente contra la libre prensa y la libertad de expresión.
La corte internacional dio la razón a la radio y obligó al Estado de Chile a establecer una serie de compensaciones por esta mala práctica y a comprometerse a nunca más repetir este tipo de acciones en contra de algún medio de comunicación, que fue lo que se ratificó hace unos días en Santiago.
De esta forma el Estado, a través del gobierno, asumió el compromiso de velar por la libertad de prensa y expresión y condenar estas arbitrariedades, a partir de lo que el mismo Gobierno denominó el “histórico caso de Radio Estrella del mar de Melinka”.
Desde el municipio saludamos este compromiso y saludamos especialmente a Narciso Nahuelquín, quien hoy ya no es trabajador de Radio Estrella del Mar y ha emprendido nuevos caminos con su propia emisora: Radio Namar, quien con mucha valentía, perseverancia y con un profundo sentido democrático y del bien común, se enfrentó a estos tratos que finalmente la justicia internacional condenó.
Compartimos una publicación que desde el Ministerio Secretaría General de Gobierno se hizo sobre el caso y la visita que el Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hizo a raíz de la firma de este advenimiento surgido por el caso de Radio Estrella del Mar de Melinka.